Solo faltan 09 días para que termine este año y se inicie una nueva aventura de 365 días, ¿qué dilema verdad? Como se dice cada año se va con su propia historia y el nuevo llega para descubrirlo, A estas alturas del año, es inevitable que nos invada la nostalgia por despedir al año que se nos va y la alegría por recibir al que llega. Asimismo casi todas nos encontramos sumergidas en una estresante movida por cumplir con nuestra agenda anual y al mismo tiempo por realizar las compras y actividades que nos imponen estas celebraciones de fin año.
En este inevitable tráfago es necesario darse un respiro para poder cerrar el círculo de este capítulo de nuestras vidas de la mejor forma posible –tarea nada fácil – sin embargo necesaria. Con el tiempo y los años una va aprendiendo que una de las mejores inversiones que una puede hacer por sí misma es darse una tregua para luego retomar la vida y todo lo que implica ello, con más fuerza, con más pasión, realizando los cambios necesarios y una visión más clara de dónde queremos llegar. Justamente pensando en ello, este fin de semana me regale un pequeño espacio para salir de mi rutina citadina y buscar un pequeño refugio en la naturaleza, lejos del taladrante ruido, del smog, de cielo gris de esta gran ciudad de la bruma mágica.
Hoy deseo compartir contigo este bello escenario, que al mismo tiempo es simple, colorido, verde y de vida intensa que palpita en cada rincón. Mientras escribo este artículo el cielo se va tiñendo de azul intenso, los rayos de sol se dejan sentir y el suave viento mece las ramas de estos enormes arboles que casi chocan con el cielo y todo cobra vida intensa, plena, casi infinita. A pocos metros hay un pequeño lago con una caída de agua que le da música celestial a todo este entorno. De hecho son escenarios que uno desea compartir con quienes más quiere y tú que estás a solo un click, leyendo este post, eres parte de este maravillo punto de encuentro y mientras escribo, pienso en ti y en todo aquello que deseo compartir contigo este próximo año.
Son las 10 de la mañana y hay una gran variedad de aves volando por el cielo y muy cerca a mi juegan en un ritual amoroso varias mariposas de colores muy vivos, asimismo la fragancia de toda esta variedad de flores ya la puedo sentir, ummmm que maravilla¡¡. Nada como la naturaleza para relajar el cuerpo, fortalecer espíritu, activar el cerebro y llenarnos de tanta paz, alegría y equilibrio.
En verdad necesitaba este espacio, para realizar un balance de mi vida en este 2011 y saber claramente cuanto avancé, cuáles fueron mis pequeños y grandes logros y sobre todo ser consciente en qué cosas y por qué me equivoque. Tener claridad en nuestro balance personal de vida, nos permite avanzar con más ganas y con mentalidad prospectiva. Hoy te invito a que regales un espacio y te des una pequeña tregua para que hagas tu propio balance, pongas en limpio, tus logros, tus aciertos y también tus desaciertos, solo así sabrás darle el valor debido a tu vida y a tus saldos a favor. En varios posts anteriores, te compartimos consejos y tips para realizar esta tarea. Aquí te paso algunos enlaces que te ayudarán en ello. Lo importante es que no dejes de hacerlo y ponerte en acción. Solo de ti depende llegar a la cima que tú misma te has propuesto.
Finalmente recuerda que eres un ser único, irrepetible, más perfecto que las aves y toda la naturaleza que contemplo en este momento. Mereces y necesites ser feliz y disfrutar de este maravilloso mundo con toda la intensidad de tus sentidos, como lo estoy haciendo en este fascinante momento. Anímate, vive estos últimos días con ganas, con pasión y siendo tú misma.
Un ciber abrazo desde este lado de la mágica bruma,
Tus amigas de
MUJER HOY
1 comentarios:
Hola amigas de Mujer Hoy.
Un cariñoso abrazo y el deseo de que tengan un año con muchas bendiciones y éxitos. Muchas gracias por ayudarnos a avanzar y ser mejores mujeres. De hecho estaré con Uds. en este nuevo año.
Vuestra amiga,
Rosario Vasquez.
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