Desde tiempos antiguos la adolescencia ha sido reconocida como un período bastante complejo, difícil en la vida humana. Tanto varones y mujeres al dejar de ser niños y púberes entran en un mundo bastante distinto, lleno de inquietudes, interrogantes y cambios no sólo corporales, ocurren aquellos de tipo psicológicos que afectan su comportamiento, sus emociones que no siempre son positivos y por lo mismo, requieren del apoyo muchas veces no solo familiar.
Todos debemos recordar que la adolescencia está relacionado a la palabra adolecer que es sufrir de algo, y en este caso de una serie de cambios rápidos, que sorprenden a los mismos adolescentes y a quienes les rodean.
Sin más preambulo vamos a pasar a dialogar sobre las características de esta etapa y hacer algunas recomendaciones para evitar algunos riesgos frecuentes:
-Los padres deben identificar algunos cambios visibles en el varón, el timbre de voz, el aumento de la masa muscular, otros en general en el cuerpo, en los órganos genitales, etc. En las niñas se inicia el desarrollo de los senos, se va estrechando la cintura, se ensanchan las caderas, aparece la primera menarquia (menstruación), el bello público entre otros, son rasgos que indican que la infancia ya concluyo.
-Es importante buscar información sobre esta etapa aunque estimes que sabes demasiado, recuerda que al paso del tiempo hay comportamientos y rasgos que son distintos y no esperemos buscar respuestas con nuestras formas de ver o de pensar de cuando fuimos adolescentes. Puedes informarte hoy en día de muchas formas, por los libros, los amigos, el internet te ofrece también alternativas. Conversar con padres de otros adolescentes o de jóvenes ya universitarios puede ayudarte mediante sus experiencias de vida.
-Procura mantenerte atenta al comportamiento de tu hijo(a) o familiar adolescente, observa detenidamente sus nuevas manifestaciones y actitudes y contrasta con las que mostraba previamente y toma nota si estos son frecuentes. Muchos se mostraran más eufóricos, con ganas de ampliar su círculo de amigos, deseando estar a la moda, exhibir algún artículo de estas nuevas tecnologías que los haga sentir muy diferentes, muy al compás de los tiempos, pueden ya no mostrar interés en el su vida escolar, etc. Mientras otros pueden tornarse más herméticos, menos comunicativos, poco interesados en los acontecimientos cotidianos, pueden estar muy cerca al Factbook, al chat y otras redes sociales que hoy en día les llama tanto la atención.
. En uno y otro caso, interesa estar cerca a ellos, conversar sin presionarlos, motivarlos a cumplir sus metas, a socializarse, manteniendo un comportamiento risueño, dinámico, de competencia consigo mismo y sin perder la interacción familiar.
- Es recomendable mostrarse respetuosa de sus puntos de vista, de sus sentimientos y emociones, saberlos escuchar sin decirles No, antes de que ellos expresen sus ideas.
-Evitemos establecer comparaciones con personas de nuestro entorno o de otras épocas, es preferible contarles, comentarles experiencias y aventuras que pueden ser referentes para ellos, antes que modelos a seguir porque creemos que son los mejores.
-Procura buscar el momento oportuno para dialogar, sin generar una suerte de enfrentamiento o de gran llamada de atención que tensiona o que anticipa a los adolescentes a ponerse en guardia o darles tiempo para preparar las respuestas que ellos desean que escuchemos.
-Enséñale a tomar decisiones, comparte algunas situaciones de la vida familiar y espera por sus opiniones, y juicios, de esta forma le ayudas a ganar autonomía y confianza en si mismos(as).
-Bríndale la oportunidad de vivir sus circunstancias, de realizar sus deseos, de participar de reuniones, y otras experiencias propias de su edad, lógicamente anticipándote a prevenirle de manera cordial pero firme los posibles riesgos.
-Es muy necesario que conozcas a sus amigos de manera directa y mejor el entorno de los mismos, evitando hacer censuras previas que limiten la apertura y confianza de los adolescentes.
- Si hay o se presenta una situación difícil no temas en enfrentarla, evitando el maltrato verbal y menos físico. Nada más crítico que dañar su autoestima en una etapa donde se vaya ensayando a ser más autónomo.
- En casa es básico el compartir responsabilidades, por tanto asignarle tareas que puedan estar incluidas en su agenda de vida.
- Muchas veces los padres o familiares próximos, - como expresión de amor - procuran complacerlos en preferencias personales, inclusive a costa de sacrificios económicos y personales. Tengamos en cuenta que estos comportamientos pueden ocasionar en ellos actitudes contrarias a las deseadas, como vanidad, falta de esfuerzo personal y muchas veces displicencia y crueldad. Deja que enfrente situaciones desafiantes con sus propias estrategias, asesóralo, oriéntalo (a), pero no le evites un fracaso o una molestia, porque de éstas habrán otras en la vida y tú no estarás siempre con ellos.
- En algún momento puede suceder que tu hijo o familiar presente una situación o un comportamiento un tanto difícil que exija una mayor atención de tu parte, o pueda que la situación rebase tus posibilidades de apoyo, en este caso no dudes en plantear tus circunstancia a un familiar, o una amistad, sin prejuicios y temores o busca la asistencia de un especialista. Recuerda que lo importante es superar el problema que tu hijo (a) este atravesando y resolverlo de forma colaborativa y oportuna.
Es mejor pensar que todas nuestras etapas de vida y especialmente la del transito a ser joven, es muy especial, para ir definiendo la identidad personal, el fortalecimiento de los valores y sobre todo debe ser un periodo de aprendizaje, de reconocimiento de si mismo y de seguir siendo feliz con el poyo de alguien tan cercano y tan especial como TU.
Un amical abrazo desde este lado de la mágica bruma,
Tus amigas de,MUJER HOY
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